Palabras cortas, letras fuertes, banderas conocidas, esa es la materia prima de las publicidades. Desde la lucha por un cargo local hasta la presidencia, todas las campaí±as tienen por sus propias características y todas quieren llamar la atención. Es ese momento del aí±o cuando la temperatura cambia cada día y, además, aparecen nuevos carteles cada día. De vez en cuando se superponen hasta que no se pueda ver la cabina de teléfono que cubren u ocultar abajo la publicidad originaria. Acá incluimos una pequeí±a selección de los carteles que vemos hoy en la capital. Hay más por el centro, pero ningún barrio esta exento de la furia cartelera.