7 de Julio de 2007
Daniel Santoro
dasantoro@clarin.com
El presidente Néstor Kirchner asumió tres fuertes compromisos políticos ante familiares de los muertos en el ataque contra la AMIA. Por un lado, dijo: «Iré a fondo para descubrir la verdad, se llame (Carlos) Menem o (Carlos) Corach» y establecer las responsabilidades de un supuesto encubrimiento de los terroristas.
Lo hizo ayer durante una reunión de casi una hora en la Casa Rosada, donde, por otro lado, también aseguró que hará todo lo posible para que la asamblea de noviembre de Interpol ratifique la decisión de mantener el pedido de captura sobre seis ex diplomáticos iraníes acusados como partícipes del ataque.
Estos y otros compromisos, Kirchner los asumió a doce días del acto por 13킺 aniversario del atentado al que se comprometió a concurrir, pese a las críticas que recibió el año pasado. Además, se registra en la comunidad un clima de ansiedad por el avance de la investigación del fiscal Alberto Nisman, a quien apoya el Gobierno luego de haber hecho destituir al ex juez Juan José Galeano hace ya tres años.
La definición sobre Menem y Corach se relaciona con el fallo del lunes en que la Cámara Federal confirmó el procesamiento de Galeano y otros por supuestas irregularidades en la causa y recomendó al juez federal Ariel Lijo profundizar la investigación sobre ex presidente y su ministro del Interior.
Pero Lijo ayer en declaraciones a Radio El Mundo fue sumamente cauto al hablar sobre la situación de Menem y Corach y diferenciar el rol de un juez del de un político: «Si se junta la prueba suficiente para imputarle a una persona un hecho se le imputa y si no, no». Así dejó traslucir que todavía, a su criterio, no hay pruebas para imputarlos.
De esta forma, el ministro de Justicia, Alberto Iribarne, se reunirá el martes con su secretario de Política Criminal Alejandro Slokar -quien es querellante en la causa- para analizar si hay pruebas contra Menem y Corach a fin de cumplir con el compromiso de Kirchner.
El otro compromiso fuerte es en el plan internacional. En caso de que Irán siga negándose a extraditar sus diplomáticos «Kirchner nos aseguró que la Argentina van a ejercer todos los derechos que correspondan y todas las denuncias en organismos en el ámbito internacional en el momento que esto se verifique concretamente», agregó Sergio Burstein, quien estaba entusiasmado. Para Burstein, Kirchner denunciará a Irán ante las Naciones Unidas por no cumplir con las leyes internacionales cuando hable ante la Asamblea General en setiembre. Una alta fuente del Gobierno confirmó a Clarín esta decisión. Esta decisión complicará las relaciones con Teherán que desde 1994 se mantiene sólo a nivel de encargado de Negocios.
Kirchner, que estaba acompañado de Iribarne y su colega del Interior, Aníbal Fernández, recibió a los familiares -además de Burstein- a Luis Czyzewski, Olga Dejtiar, Daniel Comarovsky, y al abogado Pablo Lanusse.