Este 9 de junio, 1.226.117 tucumanos estarán habilitados para sufragar en las urnas y elegir autoridades provinciales para el periodo 2019-2023. Como la Constitución provincial de 2006 lo establece, el gobernador puede acceder a una reelección consecutiva y en uso de facultades, el actual mandatario Juan Manzur buscar revalidar su cargo por otro periodo y la mayoría de las encuestas previas, la historia política de Tucumán, donde prácticamente el peronismo ha sido invencible desde su fundación en 1945 y algunos desaciertos de los candidatos opositores parecen facilitarle el camino para lograr su cometido.
Además de Gobernador y vice, se elegirán : 49 Legisladores provinciales(19 en la sección electoral I integrada únicamente por el departamento Capital, 12 por la sección electoral II integrada por los departamentos Trancas, Burruyacú, Cruz Alta, Simoca, Leales y Graneros, 18 por la sección electoral III integrada por los departamentos integrada por Tafí Viejo, Yerba Buena, Lules, Famaillá, Rio Chico, Juan B. Alberdi,Tafí del Valle, Monteros, Chicligasta y La Cocha. Por otro lado 19 intendentes municipales y 182 concejales, además de 93 comisionados rurales.
9 son los postulantes a gobernador: Juan Manzur por el Frente Justicialista Tucuman, el ex gobernador Jose Alperovich por el Frente Hacemos Tucumán, La Senadora por Cambiemos Silvia Elías de Perez por el Frente Vamos Tucuman, Clarisa Alberstein por el Movimiento Socialista de Trabajadores, Ariel Osatinsky por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, Ricardo Bussi por Fuerza Republicana, Marcela Sosa por el Frente Izquierda Juventud Dignidad, Ariel García por Evolución para la Democracia Social y Carlos Francisco Vargas por Nos Une el cambio
La cuestión cambia radicalmente cuando observamos la cantidad de postulantes para el resto de los cargos, 156 candidatos para 19 intendencias, 14126 para los 182 concejales, 1779 para los 93 comisionados rurales y 2227 para las 49 bancas de la legislatura, o sea que que 18297 tucumanos serán candidatos a algo, 1 candidato cada 67 electores!, esta proliferación de candidaturas se debe a los denominados í¢â‚¬Å“ acoplesí¢â‚¬Â , minúsculos e ignotos partidos en muchos casos que se acoplan con boletas de intendente, legisladores o concejales a partidos más grandes que de esa forma acopian votos para el candidato a gobernador. Lo más polémico del asunto que estas listas, que no son otra cosa que las colectoras, que mientras a nivel nacional y en otros distritos buscan eliminarlas por su grave efecto distorsivo a la hora de votar, en Tucumán están previstas por la Constitución Provincial.
En cuanto a lo político, Manzur parece encaminarse a un nuevo triunfo electoral, ya que además de manejar los resortes del poder, la movilización territorial y la mayoría de los acoples que llevarán su nombre como candidato a gobernador, es el único que ha logrado mantener en mayor o menor medida cohesionado a su espacio. Si bien, la presencia de Alperovich podría restarle votos, ya que originalmente eran del mismo espacio y durante 8 años fueron gobernador y vice(A pesar de que Manzur se mantuvo la mayoría de ese tiempo con licencia por su cargo de Ministro de Salud nacional), el ex gobernador no ha logrado armar un frente lo suficientemente fuerte para hacer peligrar la reelección de Manzur, apeló a su imagen personal, pero no logró rodearse de dirigentes con peso territorial y ni siquiera convertirse en el candidato del kirchnerismo que como en otros distritos aspira a una unidad del peronismo debajo de quien ostente el poder en la provincia. Ambos frentes apuntan sobre todo a la histórica marea electoral peronista del interior provincial pero no deberán descuidar sus desempeños en la Capital.
Por el lado de la oposición, Cambiemos arrancó el año con 4 potenciales candidatos, Alfonso Prat Gay, Silvia Elías de Perez, Jose Cano y Domingo Amaya, sin embargo, la crisis que afecta la imagen del gobierno nacional también hizo mella en el espacio que se fue desinflando tanto en la intención de voto como en la expectativa de í¢â‚¬Å“Vidalizarí¢â‚¬Â la provincia de Tucumán, en el sentido de repetir la experiencia de María Eugenia Vidal de 2015 de derrotar a un peronismo que parecía invencible. La ausencia de dirigentes de peso durante la campaña y la conformación de un frente que no está integrado ni por la UCR ni el PRO(Cambiemos a nivel nacional) porque las delegaciones provinciales se hayan intervenidas, completan un cuadro complejo para un espacio que buscó posicionarse finalmente con una candidata marcadamente antiaborto en una provincia que se ha declarado provida por la legislatura provincial, no obstante la insignia celeste no le alcanza para repuntar en la intención de voto. Además, por si no le faltaran problemas, el discurso anti aborto y basado en la lucha contra la inseguridad y el flagelo de las drogas de Ricardo Bussi de Fuerza Republicana le compite el electorado, se tratan de votantes desilusionados con el desempeño del gobierno nacional pero que bajo ningún concepto votarían al justicialismo. Ambos frentes apuntan a sacar un excelente resultado en el departamento Capital donde se concentra el 30% del electorado y donde históricamente han obtenido sus mejores resultados teniendo en cuenta la avasallante mayoría de votos para el peronismo que se cree ocurrirá en el interior de la provincia.
Se espera posiblemente un escrutinio lento dado la cantidad de partidos acoples que participarán de la contienda y una larga definición sobre todo para los cargos legislativos. La principal elección ejecutiva parece definida y quedara para los análisis posteriores las repercusiones que ello genere y la nueva conformación del poder en Tucumán para los próximos 4 años