Luego de la muerte de Alfonsín y de la fallida experiencia de la Alianza, el radicalismo no vió nacer, durante todos estos aí±os, a un nuevo conductor, con el carisma y autoridad suficientes, que le permitieran al partido competir con un candidato propio por la Presidencia de la Nación.
Después de la Convención Nacional celebrada en el mes de Marzo de 2015 en la ciudad entrerriana de Gualeguaychú, el radicalismo se jugaba mucho en la pasada elección del 25 de Octubre. Recordemos que en aquel encuentro participaron 330 dirigentes de todo el país, donde se discutió y debatió acaloradamente sobre cuál iba a ser la estrategia del partido centenario de cara al agitado calendario electoral por delante. Los popes llegaron a Entre Ríos con dos estrategias debajo del brazo. Una era la de Julio Cobos y Ricardo Alfonsin de ir a una gran interna opositora, integrando a los ex socios del frustrado UNEN y a sectores peronistas no kirchneristas, y la otra era la del presidente del partido, Ernesto Sanz, que consistía en aliarse con el PRO y la Coalición Cívica e ir con ellos a una interna, para que de ahí saliera el candidato a presidente al que el partido apoyaría, dándoles a los dirigentes locales, total libertad de acción para sellar las alianzas competitivas que consideraran necesarias. La estrategia triunfante sabemos cuál fue. Y fue ratificada el domingo 25 de octubre en las urnas. Como escribió en aquel entonces Andrés Malamud: “los radicales salieron de Gualeguaychú con una estrategia de alianzas, un candidato presidencial y algo más: un partido políticoâ€.
 El saldo es no negativo
Si miramos cómo quedó el mapa nacional luego de las elecciones realizadas durante el 2015, el radicalismo es gobierno en tres provincias: en Corrientes, con Ricardo Colombi, quien obtuvo su re-elección en el aí±o 2013. En Mendoza, Alfredo Cornejo triunfó en las elecciones del mes de Junio, luego de 8 aí±os consecutivos de gobernadores peronistas. En Jujuy, Gerardo Morales arrasó en la elección, sacándole 20 puntos de diferencia al candidato del oficialismo y presidente del Partido Justicialista Nacional, Eduardo Fellner.
El radicalismo tiene ademas dos Vicegobernadores: uno en la Provincia de Bs. As. acompaí±ando a María Eugenia Vidal, Juan Gobbi  y otro en Sta. Fe., Carlos Fascendini, quien acompaí±ará al socialista Miguel Lifschitz, a partir del 10 de diciembre.
A nivel municipal, los radicales registran un crecimiento del 23%. Gobernaran 446 municipios, de los cuales 83 fueron intendencias ganadas en el 2015.
Habrá radicales al frente de 9 capitales provinciales: Rio Gallegos, Viedma, Neuquén, Santa Rosa, Mendoza, Córdoba, Â Santa Fe, Paraná y San Salvador de Jujuy. En la provincia de Buenos Aires, gracias al batacazo de Vidal, la alianza Cambiemos logró el último domingo, 64 intendentes, de los cuales 41 son radicales.
En el Congreso Nacional: de los 91 diputados de la alianza Cambiemos, 44 son radicales. De los 15 senadores de ese bloque, 11 pertenecen a la UCR.
Balotaje y después….
El 22 de noviembre el país vivirá por primera vez en su historia una instancia de segunda vuelta electoral. Casi se produce en 2003, pero el ex Presidente Carlos Menem, decidió bajarse de la competencia y Néstor Kirchner se quedó así con el premio mayor.
Mucho se ha criticado al radicalismo (y aun hoy se lo sigue criticando), por esta alianza con Mauricio Macri, aduciendo que habían vendido el partido a un precio vil.  Pero ¿se tratará de una alianza electoral o podemos pensar ademas en una alianza de gobierno?.
Se prendieron varias luces de alarma cuando el propio Macri  se encargó de responder esta pregunta, cuando a las 48 hs. de conocida la decisión de Gualeguaychú, sostuvo que “no habría un gobierno de coalición†con el radicalismo. Sonaron un poco injustas estas palabras entre los socios que aceptaron poner su estructura territorial a disposición del líder porteí±o.
Hasta el momento, sabemos de la intención de nombrar a Ernesto Sanz como Ministro de Justicia en caso de que Cambiemos llegue a Balcarce 50. Habrá que ver si otros nombres radicales integrarán el gabinete de un eventual gobierno macrista.
Lo cierto es que en esta alianza estratégica, que comenzó en un acalorado sábado por la noche entrerriano y que fue confirmada en elecciones primarias y luego en las generales del 25 de octubre, la UCR ya ganó, porque sea cual sea el resultado de la elección del 22 de noviembre, habrá partido y  un puí±ado de candidatos propios para el 2019.
Ante un resultado adverso en el balotaje, ¿el PRO podrá decir lo mismo?
Patricia De Vita