A dos semanas de las PASO, Martín Sabbatella -cuya fuerza ha salido derrotada en Morón tras doce aí±os de gobierno- enfrentó duros cruces con  la ex diputada sabbatellista Vilma Ibarra sobre el espacio para la autocrítica que tendría la fuerza sabbatellista dentro del Frente para la Victoria; y reafirmó su compromiso dentro de la línea del kirchnerismo de cara a las elecciones generales de octubre.
Pese al revés en Morón, Sabbatella reafirma su fe kirchnerista
Diario La Nación
Por Gabriel Sued
Lunes 26 de Agosto de 2013
Dos semanas después del fracaso electoral del kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires, los ecos de la caída todavía retumban en Nuevo Encuentro. La fuerza de Martín Sabbatella perdió en Morón tras doce aí±os sin conocer la derrota en el distrito, que gobierna desde 1999.
Como si no bastara con ese golpe, la ex diputada sabbatellista Vilma Ibarra arrancó la semana con un duro artículo, publicado en Clarín, en el que acusó a su ex jefe político de haber abandonado el espíritu crítico con el que se relacionaba con el Gobierno y de haber bajado la bandera de la lucha contra la corrupción con la que se identificaba al partido.
En medio de ese clima, Sabbatella tiene, cuentan sus allegados, dos certezas: que la derrota en Morón fue resultado de la incorporación orgánica de la fuerza al Frente para la Victoria, castigado en la mayor parte del país y en casi toda la provincia, y que, pese a eso, su agrupación reafirmará su identidad kirchnerista.
Como seí±al de ese alineamiento absoluto con la Casa Rosada, Sabbatella cruzó el martes una línea que siempre había identificado como su límite dentro del oficialismo: compartió una actividad y se sacó una foto con el gobernador Daniel Scioli. Durante la campaí±a ya había dado otro paso que le generó cuestionamientos. Por pedido del Gobierno, bajó la lista de Nuevo Encuentro en Merlo, para no perjudicar al intendente kirchnerista Raúl Othacehé, un enemigo histórico de su sector.
«Corrimos orgullosamente la suerte del kirchnerismo», analizó un miembro de Nuevo Encuentro, que recordó que, tras llegar al poder municipal, hace 14 aí±os, la fuerza de Sabbatella sólo había perdido los comicios legislativos de 2001. «Pusimos nuestra historia en Morón al servicio del proyecto y perdimos -insistió el dirigente-. Pero peor hubiese sido no estar donde queremos estar.»
La lista que encabeza Martín Insaurralde apenas superó en Morón el 25% de los votos, frente al 37% de la boleta que encabezó Sergio Massa. La diferencia fue un poco menor en la votación para el Concejo Deliberante y en la categoría de senador provincial, cargo para el que el kirchnerismo postuló en la primera sección a Mónica Macha, esposa de Sabbatella.
El resultado significó para Nuevo Encuentro una caída de 15 puntos respecto de las elecciones de 2011, cuando Sabbatella disputó la gobernación ante Scioli con una boleta colectora de la candidatura presidencial de Cristina Kirchner. í‰se había sido el paso previo a la incorporación plena al kirchnerismo, que se concretó hace un aí±o con la designación de Sabbatella al frente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca). La derrota en el pago chico coincide con un momento en el que Nuevo Encuentro experimenta un fuerte crecimiento en todo el país, con protagonismo de sus militantes en el armado de Unidos y Organizados, presencia del partido en 18 distritos y representación institucional en seis legislaturas provinciales.
«Hicimos un proceso de acercamiento al kirchnerismo que empezó en el conflicto del campo, en el peor momento del Gobierno. Nos fuimos enamorando del proyecto a medida que se fue desplegando», explicó a LA NACION otro dirigente de Nuevo Encuentro. «El electorado castigó al kirchnerismo, y a nosotros como parte de ese paquete, pero lo hicimos por convicción; nadie nos puede acusar de oportunistas», afirmó otro dirigente sabbatellista, que aseguró que Nuevo Encuentro no alentará el corte de boleta.
Esa misma línea bajó el titular de la Afsca en el plenario que hizo el partido en Morón una semana después de las elecciones. «Vamos a ir a explicarles a los vecinos y las vecinas de nuestro distrito, con los 14 aí±os de historia recorrida en Morón, que desde nuestras convicciones más profundas, desde nuestro más hondo convencimiento, lo mejor que le puede pasar a este país es la continuidad del proceso que encabeza la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y que gane la lista que encabeza Martín Insaurralde», dijo el titular de la Afsca, para entusiasmar a sus militantes.
Sabbatella también había dado muestras de su compromiso kirchnerista el martes, cuando respondió, en Tiempo Argentino, los cuestionamientos que había hecho Vilma Ibarra. «Ingresamos [al kirchnerismo] sin bajar una sola de nuestras banderas, a compartir con otros y con otras, el proyecto que lidera Cristina y que define al campo nacional, popular y democrático del siglo XXI», sostuvo.
Para la ex diputada, en cambio, «Sabbatella arrió las banderas que alguna vez lo habían destacado. Entregó, con su silencio y con su falta de coraje, lo más valioso que tenía: su historia y su identidad».
Las críticas de Ibarra no tuvieron mucho eco en Nuevo Encuentro. Sólo la legisladora porteí±a Gabriela Cerruti se permitió un comentari0, vía Twitter: «Tengo respeto y afecto por Vilma. Y creo que plantea un debate interesante. Pero hay un punto donde surgen el rencor y el despecho».