Ante las denuncias de fraude se comenzarán a escrutar los votos en Córdoba.
La Nación
5 de Setiembre de 2007
La convulsionada provincia de Córdoba vivirá una jornada clave en el camino hacia la definición del confuso y sospechoso proceso electoral, con el recuento definitivo de los votos.
El Frente Cívico de Luis Juez, el postulante que perdió por un mínimo margen y que denunció «un robo» en los comicios del domingo último, pidió la impugnación ante la Justicia con renovadas denuncias de fraude. En este contexto, reclaman que se abran las urnas para realizar un recuento voto por voto.
La jueza electoral Martha Vidal tendrá que resolver en las próximas horas la impugnación.
Por su parte, el gobernador José Manuel De la Sota, que postuló a Juan Schiaretti, salió ayer a hablar por primera vez públicamente desde que estalló el escándalo y reclamó un «escrutinio transparente».
Retroceder con las actas. Aún con el proceso de escrutinio definitivo en marcha, Juez no cede en sus críticas. Esta mañana embistió duramente contra De la Sota y cuestionó el mensaje que el gobernador dio ayer por cadena nacional.
í¢â‚¬Å“Cuando [De la Sota] habla de escrutinio transparente habla de actas truchas que son las que hemos impugnado porque están armadas por el Correoí¢â‚¬Â, atacó el ex candidato del Frente Cívico y Social.
Tras la presentación de sus apoderados, en la que Juez pidió a la Justicia Electoral que el recuento definitivo sea í¢â‚¬Å“voto por votoí¢â‚¬Â, el intendente de la ciudad de Córdoba insistió en que si el nuevo control de los votos se hace con las actas elaboradas por el Correo Argentino y no se retrocede un paso más, í¢â‚¬Å“el resultado va a ser el mismoí¢â‚¬Â.
í¢â‚¬ÂHay 39 mil votos nulos que no se pueden analizar si no se abren las urnasí¢â‚¬Â, reforzó el candidato que quedó por debajo de Schiaretti por 1,1 punto.
í¢â‚¬Å“Lo único que queremos es que nos cuenten los votosí¢â‚¬Â, insistió Juez en declaraciones a radio Uno.
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La Nación
5 de Setiembre de 2007
Fuerte presión para que se abran las urnas en Córdoba
Juez exige un recuento voto por voto; De la Sota pidió que haya un «escrutinio transparente»
CORDOBA.í¢â‚¬â€œ Esta provincia quedó ayer al borde de una crisis institucional después de que el Frente Cívico, la alianza que postuló a Luis Juez, impugnara ante la Justicia, con denuncias de fraude, las elecciones provinciales del domingo, en las que el escrutinio provisional le otorgó un triunfo por apenas 17.000 votos al candidato oficialista, Juan Schiaretti (PJ).
Juez pidió un recuento voto por voto, mientras que sus seguidores marcharon por las calles de esta capital y los candidatos del Frente Cívico elegidos el domingo anunciaron que no asumirán sus cargos si no se reabren las urnas.
Ante el aumento de la tensión política, el gobernador José Manuel de la Sota apareció en público por primera vez desde que estalló el escándalo y pidió anoche, en un mensaje televisado, que la Justicia lleve a cabo un escrutinio í¢â‚¬Å“transparente e incuestionableí¢â‚¬Â.
Con tono grave, el gobernador no mencionó el reclamo de Juez sobre la reapertura de las urnas y sólo se refirió al recuento definitivo, que empezará hoy (y que debe hacerse, según la ley, sobre la base de los telegramas enviados desde las mesas electorales). í¢â‚¬Å“Le pido a la Justicia de Córdoba que realice prontamente el escrutinio definitivo de la reciente elección, con la participación de todos los interesados y en presencia de los medios de comunicación», reclamó.
La subjetividad en los 90 segundos que habló De la Sota quedó en claro cuando abonó la teoría que sostiene el PJ, acerca de que la amplia ventaja de Juez en la capital y las localidad del Gran Córdoba fue contrarrestada por otra de similares características en el resto de la provincia.
«El domingo pasado se manifestaron dos realidades totalmente distintas: una, en la ciudad de Córdoba y ciudades y localidades aledañas, donde un candidato opositor tuvo un contundente triunfo; la otra abarcó el resto de los pueblos y ciudades del interior provincial, donde el candidato oficialista tuvo un triunfo arrasador», aseguró.
Y, para que no quedaran dudas, agregó que pretendía «un resultado que sea aceptado por todos, que ponga fin así a las incitaciones a la violencia y a las alteraciones a la paz social». Así, aludió a la marcha en favor de Juez que ayer recorrió por varias horas el centro de esta capital.
Antes de que De la Sota emitiera su mensaje, Juez decidió postergar -por consejo del gobierno nacional- una marcha masiva prevista para el anochecer. Había temor de que chocara con una manifestación convocada por el oficialismo.
El clima estaba caldeado desde temprano. Schiaretti desestimó en duros términos el reclamo judicial del Frente Cívico: «Abrir las urnas significaría estar siete meses contando y que Córdoba se quede sin gobernador. Como aprendiz de Nerón, Juez quiere prenderle fuego a esta ciudad y dividir la provincia».
En sintonía, el secretario de Gobierno y Comunicación Pública, Marcelo Falo, acusó a Juez de «estar sembrando el odio» y de pretender «dar un golpe de Estado» al respaldar las manifestaciones frente a la sede de la justicia electoral.
Pero pese a las denuncias, por la noche el PJ realizó una concentración de militantes frente a la casa de gobierno. Bajo la consigna «cuidemos nuestro triunfo» se había montado un escenario frente a las puertas de la sede del poder local por el que desfilaron algunos grupos cuarteteros.
La jueza electoral Martha Vidal tendrá que resolver en las próximas horas la impugnación a los comicios presentada por el Frente Cívico. Juez le envió un mensaje por los medios: «Usted es responsable por lo que pasó. Ha actuado con desidia y malicia. Ahora no mariconee».
Los candidatos opositores sumaron presión: «Hay una elección sospechada y cuestionada, su legitimidad está en las urnas y en el recuento voto a voto», sentenció Daniel Giacomino, intendente electo de esta capital, al anunciar que no asumirá si no se reabren las urnas.
Dos opciones
La presentación judicial, redactada por los apoderados Miguel Oscar Pellegrini y Esteban Martínez, reclama la revisión de todas las urnas. Eso sólo está permitido por la ley electoral nacional en caso de que se detectaran irregularidades en las actas de escrutinio remitidas desde cada punto de votación. Si no, sólo se abren las urnas que hubieran sido impugnadas la noche de las elecciones.
Según explicó Ortiz Pellegrini a LA NACION, las sospechas se centran en el ingreso de datos en el sistema informático la noche del domingo y la madrugada del lunes en la sede local del Correo Argentino. Esa tarea que estuvo a cargo de 64 empleados contratados para la ocasión. «Los fiscales de los partidos no tuvimos acceso al proceso de carga de datos, no podíamos ver qué se hacía ahí», señaló.
Mientras los abogados presentaban su impugnación, sobre la calle Caseros una multitud insultaba a los referentes del peronismo local, a los que denunciaba de haberles robado la elección. Concluido el acto, la movilización se trasladó al Palacio de Tribunales, donde se dispersó pasado el mediodía.
Allí dio, varias horas después, una conferencia de prensa el titular del Tribunal Superior de Justicia, Armando Andruet, en la que condenó la «convocatoria a manifestaciones públicas» y presentó una acordada que llamó a los dirigentes políticos «a comprometer sus esfuerzos para preservar la paz social».
El frente de Juez igual insistirá. Una nueva marcha fue convocada para mañana, a las 18, frente a la sede del Correo Argentino, y llevará el nombre de «Marcha de las manos abiertas».
Por Gustavo Ybarra
Enviado especial