Ya se desató una pulseada para ocupar lugares en la única lista del oficialismo.
Clarín
7 de Agosto de 2007
Mariano Pérez de Eulate
mpeulate@clarin.com
Develada la incógnita sobre el compañero de fórmula de Daniel Scioli, empezó en el kirchnerismo de la provincia de Buenos Aires el tironeo para definir la lista de diputados nacionales que acompañará a la boleta del vicepresidente.
De entrada hay que decir que, a diferencia de 2005 -en plena pelea entre Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner- esta vez todas las vertientes del oficialismo deberían convivir, aparentemente, en una sola papeleta. Será el Presidente, en todo caso, quien deba hacer malabares para conformar a todo el universo kirchnerista.
Dicen que el gobernador Felipe Solá está chocho de contento con la confirmación de que Alberto Balestrini, actual titular de la Cámara de Diputados, será el vice de Scioli.
Felipe cree -y, en verdad, muchos lo dan por sentado- que él encabezará la lista legislativa del oficialismo en octubre y acaso eso sirva para llegar a la presidencia de la Cámara Baja en reemplazo de Balestrini o, eventual mente, a algún ministerio en un hipotético gobierno de Cristina Fernández.
Fuentes kirchneristas admiten que Solá conserva relativa buena imagen y alto nivel de conocimiento. En la tesis presidencial de triunfar arrolladoramente en Buenos Aires para asegurar la primera vuelta a nivel nacional, el gobernador aparece como una buena opción para estar al tope de la nómina que irá al Congreso y para hacer campaña junto al vicepresidente y candidato a sucederlo desde diciembre.
Solá querría, además, colar algún otro hombre propio, tal vez un ministro de su actual gabinete o algunos de sus principales operadores en la Legislatura provincial.
El PJ bonaerense que alguna vez fue duhaldista, siempre según las fuentes, habría acorda do con Kirchner que al menos un cuarteto de dirigentes integre la lista oficial, casi todos con experiencia legislativa.
Trascendieron algunos nombres que podrían estar en esa lista que, se repite, dependerá de la voluntad final de Kirchner y sus acuerdos políticos. José María Díaz Bancalari es el titular del PJ provincial y preside el Bloque Peronista Federal en la Cámara baja. Bancada que, se comenta, dejará de existir el año próximo para fusionarse con el bloque kirchnerista propiamente dicho en un sólo espacio. Bancalari, dicen, tendría asegurada su reelección.
El nicoleño habría acercado otros nombres de mínima. Como el de Graciela Camaño, la esposa del sindicalista Luis Barrionuevo y de vasta experiencia en temas laborales. El de Jorge Landau, diputado de bajo perfil pero que conoce como pocos los secretos legales del PJ al punto que es uno de sus apoderados. El hombre sería clave para el proceso de reencuentro con el justicialismo que planearía el Presidente.
Otros nombres del ex duhaldismo que sonaron son:
La actual vicegobernadora Graciela Gianettassio, a quien en la Casa Rosada habrían medido con especial atención. Por conveniencias políticas, sin embargo, la mujer podría encabezar la lista de senadores provinciales de la Tercera Sección Electoral.
El diputado de extracción gremial Alfredo Atanasof, un puente con la cuestión parlamentaria del Mercosur.