El PJ disidente juega con dos cartas en la Provincia: Blumberg o Patti


Clarí­n
6 de Agosto de 2007
Mariano Pérez de Eulate
mpeulate@clarin.com
Hay algo que está claro en el peronismo anti K: en ese espacio crí­tico del Gobierno (capitaneado por el quinteto Carlos Menem-Jorge Sobisch-Ramón Puerta-Adolfo y Alberto Rodrí­guez Saá) están convencidos de que deben dar pelea en la provincia de Buenos Aires, aun cuando los números actuales favorezcan ampliamente al candidato del Gobierno, Daniel Scioli. Sabe este grupo de peronistas que para hacer una elección más o menos seria a nivel nacional necesitan un desempeño aceptable en tierra bonaerense: hablan de sacar en la Provincia al menos un 20 por ciento para no hacer papelones en la general. En todo caso, su dilema por estas horas pasa por el nombre del postulante a presentar: í‚¿Juan Carlos Blumberg o Luis Patti?
No oficialmente, pero de esto se habló en el Congreso realizado el fin de semana, en el que, a modo de gesto beligerante, pidieron la intervención del PJ bonaerense, que preside el peronista K José Dí­az Bancalari. Algo que no pasará, claro, pero que les sirve para afianzar su idea de que ellos -y no el kirchnerismo- son los verdaderos justicialistas.
Como sea, Blumberg y Patti son, hoy por hoy, las posibles cartas electorales de los rebeldes en la Provincia. Puertas adentro, el padre de Axel parece el más decidido a no declinar aspiraciones. Fuentes del espacio anti K contaron que en sus encuestas sigue siendo quien más alto mide en intención de voto, aun después del papelón del falso tí­tulo de ingeniero, que marcó el alejamiento con el macrismo.
Caí­da su posible alianza con Mauricio Macri, Blumberg les ha dicho a sus posibles socios que se tomará unos dí­as más para charlar con diversos sectores y luego avanzará en una decisión: por ahora, en efecto, su candidatura a gobernador no tiene ningún paraguas nacional.
La oferta más firme que ha recibido es de Sobisch: el neuquino -jugado a la pelea nacional, ya que no volverá a ser gobernador de su provincia- le propuso sellar una alianza para luego sentarse a negociar con el resto de la mesa chica anti K la fórmula nacional y la bonaerense juntas.
Patti, por su parte, parece más cerca de los Rodrí­guez Saá y Menem, incluso Puerta, que de Sobisch. Chapea el ex comisario con la cosecha de casi 400 mil votos que obtuvo en 2005, en aquella elección luego de la cual no pudo entrar a la Cámara baja porque el kirchnerismo frenó su ingreso.
Patti tal vez especule con una pronta resolución de su situación en el Congreso para tomar la decisión de seguir manteniendo pretensiones provinciales o declinarlas en favor de un único candidato del espacio rebelde. Esto es: si se lo habilita a asumir como diputado probablemente se baje de la postulación a gobernador, dicen en el antikirchnerismo. Fuentes ligadas al ex policí­a, sin embargo, aseguran que ambas cosas no son necesariamente excluyentes.